Controlar la Ansiedad con Respiración Abdominal

En este artículo de Que es la Ansiedad y Como se cura te mostramos como podemos controlar la ansiedad con ejercicios de Respiración Abdominal

Cuando tenemos trastornos de ansiedad, uno de los problemas más frecuentes con los que nos enfrentamos es que, cuando aparece una crisis, tendemos a hiperventilar, esto es: a coger más aire del necesario, lo cual hace que nuestro malestar se intensifique.

Imaginemos a los buceadores, estas personas antes de realizar una apnea (bucear a pulmón, o lo que es lo mismo, sin respirar), lo primero que hacen es coger mucho aire para tener mayor resistencia. Ellos, son profesionales experimentados, saben lo que hacen y, para ellos, es un proceso beneficioso.

Para el resto de los mortales la hiperventilación puede ser un problema. Coger más aire del necesario en un corto espacio de tiempo produce mareos, desequilibrios, etc.

Como planteábamos al principio, cuando las personas tenemos trastornos de ansiedad, tendemos a hiperventilar de manera inconsciente en situaciones de nerviosismo. Nuestro cuerpo se intenta defender de la situación de aparente peligro oxigenando nuestra sangre y, para nosotros no resulta nada beneficioso, pues no es una respiración controlada y nos produce mareos y sensaciones desagradables que nos alejan de la relajación necesaria para controlar la ansiedad.

En que es la ansiedad y como se cura somos conscientes del problema y vamos a darte una pauta que nos permitirá manejar con garantías esta situación,

En las películas aparece con relativa frecuencia el que cuando una personaje se pone nervioso, hiperventila y la solución que dan es la de utilizar una bolsa (las bolsas de las películas americanas son de papel) tapando boca y nariz y respirando a través de la misma. El objeto de este sistema es que, al respirar a través de la bolsa, la calidad del aire se empobrece y, aunque respiremos rápidamente, no conseguimos hiper-oxigenar.

Cuando estamos hablando de controlar la ansiedad no vamos a recurrir a este sistema porque, aunque queremos evitar la hiperventilación, nuestro principal objetivo es aprender a manejar la ansiedad, encontrar la manera de conseguir de manera consciente que la ansiedad se mantenga en un nivel considerado "normal".


Controlar la Ansiedad con Respiración Abdominal




Si nos fijamos en los recién nacidos cuando estos están durmiendo veremos que, al respirar, hinchan y deshinchan la barriga. Nosotros cuando respiramos no solemos hacer esto, nosotros solemos respirar hinchado el pecho.

Para controlar la ansiedad deberemos aprender a respirar como los niños: con la Respiración Abdominal.

Para realizar este ejercicio nos sentaremos cómodamente en una silla, apoyando la espalda en una posición lo más cómoda posible pero intentando mantener la espalda recta.

Utilizaremos ropa cómoda, en especial que no no oprima la barriga y buscaremos el momento de poder realizar el ejercicio: transcurrido un tiempo prudencial después de comer y cuando tengamos una cierta garantía de que no van a molestarnos durante el tiempo del ejercicio.

En esta postura, apoyaremos una mano sobre el pecho y otra en la barriga. El objeto de estas manos es controlar el que vamos a intentar respirar sin mover el pecho, hinchando y deshinchando la barriga. Es lo que se denomina respiración abdominal o diafragmática.

Cuando veamos que ya controlamos la respiración, comenzaremos a controlar el ritmo de la misma: inspiraremos mientras contamos lentamente hasta cuatro, mantendremos el aire contando nuevamente hasta cuatro y expiraremos contando hasta seis, para volver a realizar el proceso de inspirar.

Al principio, si vemos que nos falta el aire, podemos acortar los periodos, esto es: contar sólo hasta tres (o hacerlo más rápido).

El objeto de este ejercicio es aprender que tenemos todo el aire que necesitamos, que no hace falta tomar tanto aire. Con este control de la respiración conseguiremos disminuir el ritmo cardiaco y, con él, el nerviosismo y, por tanto la ansiedad. 

Recordar: Por desgracia no es suficiente con conocer la teoría, para poder poner en práctica la técnica que hemos descrito, primero deberemos practicarla hasta poder aplicarla con una relativa facilidad y así poder usarla en el momento que nos sea útil.



Vivir sin ansiedad no sólo es posible sino que es algo que te mereces, es tú derecho.